Hablar con un profesional de atención médica es un paso importante para determinar si sus síntomas podrían ser de fibrilación auricular (AFib). Existen muchos métodos que un médico puede utilizar para determinar si sus síntomas se deben a la AFib, pero también hay algunas cosas que usted puede hacer para prepararse para su cita y que pueden ayudar a un profesional de atención médica durante el examen.
COMPLETE LA GUÍA
DE SÍNTOMAS
Los síntomas de AFib pueden ir y venir, por lo que su seguimiento puede ayudar al médico a obtener información importante. Descargue y complete la Guía de síntomas para documentar sus síntomas.
HABLE CON UN SER
QUERIDO
Considere hablar con un ser querido sobre sus síntomas y pedirle que lo acompañe a una cita médica, porque su apoyo puede ser importante para su proceso.
ESCRIBA SUS PREGUNTAS
Es importante comprender sus síntomas y su condición, así que antes de la cita escriba las preguntas que pueda tener para el médico.
LLEVE UN REGISTRO DE
SUS MEDICAMENTOS
Haga una lista de todos los medicamentos que toma actualmente (incluidos los de venta libre o sin receta, medicamentos y suplementos) y asegúrese de comentarlos con un médico.
REÚNA INFORMACIÓN
SOBRE SU SEGURO
Asegúrese de llevar toda la información sobre seguros que pueda necesitar, como su tarjeta de seguro.
COMENZAR DE NUEVO
Lleve a su cita la Guía de síntomas debidamente completada y la lista de preguntas. La información detallada sobre sus síntomas y la frecuencia con que aparecen puede ser útil para usted y para el médico durante el examen.
Solo un profesional de atención médica puede diagnosticar la AFib. Para detectar la AFib, un profesional de atención médica puede realizar varias pruebas:
Los controles del pulso son pruebas sencillas en las que un profesional de atención médica coloca los dedos cerca de una arteria y mide el pulso, es decir, la cantidad de latidos del corazón por minuto.
La auscultación del corazón es el método de escuchar el corazón con un estetoscopio durante un examen físico para determinar si el sonido es normal o anormal.
El electrocardiograma, también llamado EKG o ECG, es una prueba que usa pequeños parches llamados electrodos, que se colocan en la piel, para monitorear el ritmo cardíaco y detectar ritmos anormales. Los EKG se pueden usar para confirmar el diagnóstico de AFib.
Dado que los síntomas de AFib pueden ir y venir, es posible que sea necesario que un profesional de atención médica le monitorice el corazón para detectar episodios de AFib. Es importante que siga en contacto con un profesional de atención médica durante todo el proceso de diagnóstico.
CÓMO ABOGAR POR UNO MISMO
Recuerde que usted es su principal defensor y tomar algunas medidas para prepararse para la cita puede ayudarle a la hora de acudir a la consulta con un profesional de atención médica.
Si tiene uno o más síntomas, haga una cita.