DVT es un coágulo de sangre en una vena profunda, generalmente en la pierna, el muslo o la pelvis y también puede ocurrir en el brazo.
PE es un coágulo de sangre en los pulmones y es la afección más grave que puede causar DVT. Esto sucede cuando un coágulo por DVT, o una parte de él, se desprende y viaja por el torrente sanguíneo hasta a los pulmones, reduciendo o bloqueando el suministro de sangre. Esto puede
ser mortal.
Los síntomas de DVT, generalmente
en la pierna, el muslo o la pelvis,
pueden incluir:
Los síntomas de PE
pueden incluir:
Buscar pronta atención médica puede ayudar a
reducir las probabilidades de que la DVT o PE se agraven.
Si tiene uno o más de estos síntomas, comuníquese con un médico o profesional de atención médica.
Los síntomas también se pueden asociar con otras condiciones médicas potencialmente graves no relacionadas con la DVT o la PE.
Solo un profesional de atención médica puede determinar si estos síntomas indican DVT o PE u otra condición médica.
Estos son algunos factores de riesgo que pueden aumentar su probabilidad de desarrollar DVT/PE. Estos incluyen:
“Tuve dificultad para respirar.
En un par de semanas empecé
realmente a toser sangre.”
un paciente con PE
Aproximadamente el 50% de
las personas que tienen DVT
quizás no tengan ningún síntoma.
Existen múltiples opciones para tratar los coágulos sanguíneos de la DVT o la PE y reducir el riesgo de que vuelvan a ocurrir. Un profesional de atención médica decidirá si necesita tratamiento, así como la duración del mismo, y determinará con usted qué opción puede ser la más adecuada.
Si le han diagnosticado DVT o PE, hable con un profesional de atención médica sobre una opción recetada.